Déficit de Atención con Hiperactividad o sin (TDAH)
El Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad o sin (TDAH) es un trastorno a menudo diagnosticado durante la infancia y la adolescencia, pero que en algunos casos pasa desapercibido en estas edades y persiste en la edad adulta ocasionando problemas en la persona que lo sufre. El Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad o sin (TDAH) se caracteriza por tres síntomas fundamentales, presentes desde la infancia y que evolucionan a lo largo de la vida en función de cada caso.
- Dificultades para mantener la atención de forma selectiva y sostenida con capacidad para ignorar los estímulos que distraen para mantener la atención en la tarea que se está realizando
- Tendencia a comportarse de forma impulsiva, sin evaluar las consecuencias del comportamiento
- Hiperactividad o dificultad para mantener una conducta calmada, que hace que el paciente necesite estar físicamente activo, en movimiento. En el mejor de los casos, los adultos aprenden a mantener un comportamiento adecuado pero pueden sentir una sensación de inquietud interna
Cuando un Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad o sin (TDAH) no es diagnosticado y tratado pueden surgir problemas, como:
- Dificultades para seguir unos estudios académicos, a pesar de tener unas capacidades adecuadas
- Dificultades en el desarrollo de un trabajo y en el lugar de trabajo, debido a una actitud despistada, y a olvidar o perder cosas importantes
- Problemas derivados de la impulsividad como son el consumo de tóxicos, la conducción de vehículos a mucha velocidad u otros problemas con la justícia
- Dificultad para mantener una estabilidad tanto laboral como en las relaciones afectivas. Como consecuencia de estos problemas pueden aparecer estados depresivos o de ansiedad
- Evaluación y diagnóstico
-
Para solucionar los problemas derivados de un Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad (TDAH) en el adulto, es importante diagnosticar la patología aunque la persona sea ya adulta. Tener conocimiento del trastorno permite hacer un abordaje terapéutico adecuado a las necesidades de cada persona y adquirir estrategias para paliar sus consecuencias.
La evaluación, diagnóstico y tratamiento del TDAH del adulto se realiza por un/a psicólogo/a través de pruebas de test que nos ayudan a valorar las dificultades de la persona. Estas pueden presentarse como dificultades de planificación, de memoria de trabajo, de atención, de control de la respuesta impulsiva y de funciones ejecutivas. Una vez hecho el diagnóstico se ofrece el tratamiento adecuado, que puede ser farmacológico y/o psicoterapéutico. También puede ser adecuado realizar un entrenamiento cognitivo, presencial en consulta o mediante el programa a distancia Guttmann NeuroPersonalTrainer®.
La rehabilitación cognitiva con Guttmann, NeuroPersonalTrainer® es un tratamiento de rehabilitación neuropsicológica que consiste en un proceso activo que ayuda al paciente a optimizar la recuperación de las funciones superiores (atención, percepción, memoria, funciones ejecutivas, cálculo,...), a comprender mejor las alteraciones que presenta y desarrollar es
En Guttmann Barcelona realizamos el tratamiento de los trastornos emocionales y conductuales, tanto en los adultos como en la infancia y la adolescencia, desde la perspectiva cognitiva-conductual, es decir, utilizando un enfoque pragmático centrado en los síntomas, basado en un método científico que
Cada vez hay más evidencia científica sobre los beneficios de la práctica del Mindfulness en la salud y el bienestar. Con este Programa de iniciación a la meditación y el mindfulness experimentarás y conocerás un método con el podrás llegar a estados de may
TE PUEDE INTERESAR
Así, el viernes tuvimos la oportunidad de asistir a un animado debate en torno a “La Salud Mental se puede rehabilitar” donde la periodista...
Con ilustraciones creadas expresamente y bajo el paraguas de "Déjate ayudar", la campaña enfatiza mensajes clave como "No hay salud sin...
El TDAH afecta al 3-4% de la población adulta de entre 18 y 44 años ( Aragonés et al., 2010 ) y aunque se considera un síndrome frecuente...