El retraso en la adquisición del lenguaje y el habla puede darse cuando algunas de las habilidades y conocimientos de los diferentes sistemas que el lenguaje necesita están alterados. Desde los primeros días de vida, los bebés prefieren prestar atención al habla de sus cuidadores que a otros sonidos y ruidos del entorno. También sabemos que los bebés reconocen la voz de su madre desde los primeros días de vida, y la saben distinguir de otras voces similares de su entorno. Por lo tanto, antes de aparecer las primeras palabras existen una serie de precursores lingüísticos que son indispensables para que el lenguaje tenga un desarrollo dentro de la normalidad. En la adquisición del lenguaje intervienen de forma muy importante las habilidades de comunicación para las que son necesarias la atención compartida, la interacción y la intencionalidad.

LENGUAJE INMADURO RETRASO SIMPLE

Los niños que tienen un lenguaje inmaduro tienen un retraso simple en la adquisición del lenguaje pero pueden presentar una evolución normal. Es decir, las primeras palabras aparecen un poco más tarde de lo que suele ser habitual. Los niños con lenguaje inmaduro y un retraso de unos 6 meses en la adquisición de los hitos no se encuentran en una situación patológica. Aún así, se puede considerar un signo de alerta y son niños que pueden beneficiarse de pautas de estimulación del lenguaje y el habla.

RETRASO DEL LENGUAJE

Si la etapa de lenguaje inmaduro o retraso simple no evoluciona favorablemente, se convierte en un retraso del lenguaje. En este caso, la aparición de las primeras palabras se retrasa, y pueden aparecer entre los dos años y medio o tres años. Los niños con retraso del lenguaje presentan dificultades en combinar dos núcleos o iniciar la frase simple (sujeto + verbo + objeto). También pueden presentar problemas de comprensión oral, tanto en órdenes simples como complejas. Cuando las dificultades del retraso del lenguaje se van consolidando más allá de los 6 años se podría establecer el diagnóstico de Trastorno del lenguaje.

DISLALIAS

Las dislalias son dificultades en la pronunciación del habla y de sus sonidos. El lenguaje es correcto, el niño conoce el vocabulario y es capaz de realizar frases estructuradas pero hay algún sonido que no sabe producir, como puede ser la letra s, la r, etc. Estas dificultades pueden ser evolutivas en ciertas edades y no es necesario intervenir hasta que no se superan los períodos considerados normales para la correcta pronunciación de determinados sonidos.

TRASTORNO FONOLÓGICO

Un trastorno fonológico hace referencia a aquellas dificultades tanto del habla como del lenguaje que ocasionan una producción lingüística poco inteligible. Los niños con trastorno fonológico tienen un lenguaje fluido pero cuesta mucho entenderlos. Los errores que cometen son fonológicos y se observan tanto en la producción correcta de los sonidos como en la de las palabras. Los errores más frecuentes que podemos observar son la omisión y el cambio de unos fonemas por otros.

ALTERACIONES EN LA COMUNICACIÓN Y LA INTENCIONALIDAD

La comunicación, la intencionalidad o la atención compartida son algunas de las dimensiones absolutamente necesarias para el correcto desarrollo del lenguaje. Hay niños que muestran poca intención comunicativa, no buscan al adulto ni al igual para compartir información, o sólo hacen demandas muy específicas en necesidades personales muy básicas. En estos casos, es necesario profundizar en el diagnóstico y valorar otros aspectos del neurodesarrollo.