El dolor neuropático (sensibilización central) es aquel que se produce a consecuencia de una lesión o disfunción del sistema nervioso. A veces es secundario a una lesión del nervio periférico (por ejemplo después de un herpes, o asociado a la diabetes o por un problema radicular) y otros por una lesión del sistema nervioso central (ya sea en el cerebro o en la médula espinal) como sucede después de un ictus, un traumatismo craneoencefálico, un traumatismo o una inflamación medular, un tumor cerebral o medular, o enfermedades como la esclerosis múltiple. El dolor neuropático es diferente del dolor articular o muscular.
Se suele manifestar de diferentes formas:

• Hormigueo
• Sensación de quemazón o punzante
• Percepción de presión o de alteración de temperatura
• En muchas ocasiones, el paciente percibe como dolorosos estímulos que no deberían serlo (una carícia, el roce de la ropa o las sábanas, etc.)

El dolor neuropático se trata de un dolor que no suele responder a los analgésicos habituales, requiriendo como primera medida fármacos capaces de actuar sobre el sistema nervioso. A veces se puede recurrir a tratamientos locales, principalmente cuando la causa del dolor neuropático se debe a una lesión del nervio periférico.

TRATAR EL DOLOR NEUROPÁTICO

En el dolor neuropático se pueden producir  "fenómenos de sensibilización", que implican un aumento de la percepción del dolor que puede darse a nivel periférico o central. Este fenómeno repercute en cambios emocionales, alteración funcional y en la situación de salud y social del propio paciente. Por ello uno de los objetivos del tratamiento en el dolor neuropático se dirige a evitar la aparición de estos síntomas, controlando el dolor con el uso de uno o varios fármacos, pero siendo también necesario en la mayoría de los casos un abordaje terapéutico que incluya un enfoque psicológico y rehabilitador.

En Guttmann Barcelona desarrollamos un nuevo tratamiento que combina la estimulación cerebral no invasiva (TDCs) con realidad virtual. La combinación de estas dos técnicas induce un efecto analgésico más intenso y duradero, sin efectos secundarios, lo que constituye una alternativa terapéutica complementaria al tratamiento farmacológico.

El dolor neuropático engloba actualmente diferentes patologías, no todas ellas reconocidas, pero que parecen compartir mecanismos de producción comunes que pueden explicar muchos de sus síntomas: Fibromialgia, Síndrome de Fatiga Crónica, Síndrome de Intestino Irritable, Disfunción temporomandibular, Sensibilidad Química Múltiple, Migraña Crónica, Cefalea Tensional, Síndrome de la Vejiga Dolorosa , vulvodinia, Síndrome de las Piernas Inquietas o el Síndrome Regional Complejo, entre otros.