Inicio del programa "La Mochila Viajera" para el desarrollo de habilidades sociales en niños y niñas

Las habilidades sociales son un conjunto de comportamientos implicados en las relaciones interpersonales y relacionadas con las emociones y sentimientos. Permiten establecer vínculos significativos con otras personas a lo largo de la vida, pero existen situaciones en las que no se desarrollan de manera óptima. En este contexto, “La Mochila Viajera” se dirige a niños con un trastorno del espectro autista (TEA), un trastorno de desarrollo del lenguaje u otras alteraciones de personalidad o conducta que necesiten de un acompañamiento terapéutico para establecer una buena base para la socialización.

El tratamiento se estructura en 14 sesiones grupales semanales y una individual final, en la que se analizará con las familias el progreso realizado por el niño y se ofrecerán recomendaciones para continuar el abordaje en su entorno. Los grupos son de un máximo de 6 personas y las familias participan al final de cada sesión. "Los programas existentes hasta ahora ofrecían un tratamiento individual que no facilita que el niño aplique las estrategias adquiridas en un entorno grupal, dificultando la generalización posterior en su entorno ecológico", razona Berta Fernández, neuropsicóloga de Guttmann Barcelona que está a cargo de las sesiones. En este sentido, la coordinadora de Neuropsicología en Guttmann Barcelona Eulàlia Solís destaca que “la inclusión de las familias en los tratamientos es algo que ya se aplica en varios programas y forma parte del ADN Guttmann”.

Trabajo más allá de las sesiones

En cada una de las sesiones se trabaja una competencia diferente como la identificación de las emociones, la resolución de conflictos, el trabajo en equipo o la utilización del humor y los dobles sentidos. Al finalizar, cada participante se lleva dentro de su “mochila viajera” un pequeño recordatorio visual de lo trabajado, para que lo pueda seguir poniendo en práctica a lo largo de la semana. "El entorno natural del niño es el contexto ideal de aprendizaje, por la cantidad de oportunidades de comunicación y de relación que se dan", explica Fernández.

"La Mochila Viajera" no se centra únicamente en las habilidades relacionales y de comunicación, sino que también realiza un abordaje de la conducta, fomentando la flexibilidad y el juego cooperativo. Utiliza además recursos tecnológicos, puesto que los participantes son nativos digitales y se ha demostrado la utilidad de este tipo de herramientas en el tratamiento para niños con TEA.

En esta primera edición participan 6 niños de entre 8 y 10 años, aunque el objetivo en un futuro es abrir otros grupos a partir de 6 años.

Web del Programa de entrenamiento de las habilidades sociales.